“Este año no es covid; si tienes fiebre, congestión y dolor de garganta seguramente estás pasando una gripe.” Es el mensaje que están dando la mayoría de médicos estos días. La pandemia de covid parece que haya quedado en el olvido. El virus de la gripe ha vuelto a adueñarse este año de las infecciones respiratorias.
Desde principios de diciembre, el aumento de casos en España ha sido exponencial y estos primeros días de enero ya ha superado lo que se conoce como umbral epidémico. Se llama así cuando se superan los 36 casos diagnosticados por cada cien mil habitantes. Y ya se acerca a los 50 casos, según datos del Centro Nacional de Epidemiología.
Es solo la primera oleada. La que se ha estado produciendo por las cenas de amigos y familiares durante los días previos a la Nochebuena y el día de Navidad. Las autoridades sanitarias están ya preparándose para la segunda ola, la de los contagios a partir de Nochevieja y Reyes.
Sin embargo, el gran pico se espera ahora con el regreso de los niños al colegio y la vuelta generalizada al trabajo.
Primeros colapsos hospitalarios
De momento, donde se están registrando el mayor número de casos es en Madrid, Cantabria, Castilla y León, Cataluña y País Vasco.
En concreto, en Cataluña ya hay aviso de colapso en urgencias. Casi se han doblado los casos respecto al año anterior. Según datos del Hospital Clínic de Barcelona, las colas en urgencias pueden superar las diez horas.
De todas formas, las cifras de gravedad de la gripe no son preocupantes. De los casos que se complican, la mayoría, uno de cada cuatro, es por pasar a neumonía.
De todos los ingresos hospitalarios provocados por una infección de gripe, solo el 5,6% necesita entrar en la UCI y un 3% acaban con la muerte del paciente. No son datos diferentes a otros años. La mayoría de ocasiones la persona tenía una edad avanzada u otras patologías previas.
La gripe no es especialmente preocupante. Lo que más se temía tras la pandemia es que el virus de la gripe volviera reforzado y más grave. Eso no se ha producido.
La variante más extendida del virus es la del tipo B, que era lo esperable. No ha habido sorpresas. Y las vacunas de la gripe están respondiendo muy bien y ayudando a frenar los casos graves. El problema, en todo caso, es que desde el final de la pandemia, la campaña de vacunación ya no tiene tanto éxito.
La covid queda relegada
Las tasas de incidencia por grupos de edad (recordemos que solo están referenciados aquellos que acuden al médico, faltan contar los que se automedican y tratan en casa), la encabezan los menores de un año. Hay más de 4.000 casos por cada cien mil habitantes. Le siguen los niños de 1 a 4 años.
¿Qué ha pasado para que la gripe coja tanta importancia este año? Los expertos explican que es más una cuestión de perspectiva. En años previos, compartía protagonismo con los contagios de covid. Este invierno, la covid no se ha extendido tanto y el virus de la gripe le ha quitado espacio y protagonismo.
Los virus pueden coexistir. Hay casos de personas que se contagian a la vez de dos o más virus respiratorios. Pero no es lo habitual. Lo más común es que una vez nos contagiamos de un virus, las defensas se activan y los otros virus no tienen tanta capacidad para invadirnos.
La covid no ha desaparecido. Cabe recordar además que no es tan estacional como la gripe. Puede aparecer en los meses de calor. Pero sí es cierto que este invierno apenas se diagnostican casos.
Las tres recomendaciones clave
Es triste decirlo. Para gran parte de la población, la experiencia de la pandemia de covid ha quedado en nada. Las tres grandes medidas para frenar los virus respiratorios no se cumplen como antes. Y es una pena porque seguirlos habría supuesto una mucho menor incidencia de la gripe.
- La mascarilla. A la menor señal de infección, aunque sea un leve constipado, ponernos la mascarilla cada vez que cogemos transporte público o nos reunimos con otras personas. Es la mejor manera de protegerlos.
- La vacunación. Las personas vulnerables, mayores o con enfermedades previas, y el personal sanitario podrían protegerse mejor y evitar casos graves con la vacuna de gripe y covid.
- La ventilación. En las reuniones de muchas personas mantener la habitación algo ventilada, sobre todo cuando se sospecha que puede haber algún contagiado. Los ambientes cargados con aire estancado son la principal puerta a que una persona infecte a muchas otras. Basta con dejar una rendija en la ventana que permita que corra el aire para reducir riesgos.
En todo caso, no cometamos más errores. Si tienes gripe, recuerda que los antibióticos no sirven para acabar con el virus. Mucho líquido, descanso y buenos alimentos son la mejor medicina.