Según la Asociación Española de Urología, la cistitis es un problema que afecta a 1 de cada 4 mujeres en nuestro país. La razón por la que el colectivo más diagnosticado con esta infección sea el de las mujeres, es porque la uretra femenina es más corta que la masculina, lo que "facilita la entrada de bacterias desde el ano", explica la Dra. Mercedes Herrero, ginecóloga, sexóloga y jefa de la unidad de mama de Gine4 en HM Hospitales Montepríncipe y Sanchinarro. "Además, -continúa la experta- factores como el embarazo, la menopausia y el uso de ciertos anticonceptivos pueden aumentar el riesgo. Personas con un sistema inmunitario debilitado o con antecedentes de infecciones urinarias también tienen mayor probabilidad de desarrollar cistitis".
Temporada de cistitis
Antes de entrar en los detalles acerca de cómo se puede evitar la cistitis, vale la pena recordar en qué consiste. A grandes rasgos, se trata de una inflamación de la vejiga que puede causar síntomas molestos como dolor al orinar, necesidad frecuente de miccionar y sensación de ardor.
Además, hay que tener presente que a pesar de que no se trata de un problema exclusivamente de verano, lo cierto es que la época estival es el periodo del año en la que más casos de infecciones urinarias se detectan.
Por tanto, la cuestión que se plantea es por qué la cistitis repunta claramente los meses de verano. Según la doctora Herrero, la razón la encontramos en las condiciones ambientales: "El calor y la humedad del verano crean un entorno propicio para el crecimiento de bacterias. Además, actividades como nadar en piscinas o en el mar pueden introducir microorganismos en el tracto urinario, aumentando el riesgo de cistitis".
Para evitar la cistitis
Aunque la garantía total de no sufrir una infección urinaria no es posible, lo que sí podemos hacer es tomar algunas medidas para reducir el riesgo. En este sentido, la doctora Herrero recomienda las siguientes:
1. Hidratación adecuada. Mantener unos niveles de hidratación mínimos es fundamental siempre. Ahora bien, en verano todavía lo es más, ya que es la manera de "mantener el tracto urinario limpio y libre de bacterias", apunta la ginecóloga. Se recomienda beber al menos 8 vasos de agua al día.
2. Higiene personal. La humedad puede favorecer la proliferación bacteriana. Por ello, después de nadar es importante cambiarse el traje de baño mojado por ropa seca y limpia lo antes posible. "La higiene genital adecuada es crucial. Use jabones adecuados para esta zona que respeten el pH y evite productos irritantes", añade la Dra. Herrero.
3. Ropa adecuada. La idea es evitar prendas ajustadas que puedan retener humedad. Para ello, lo mejor es usar ropa interior de algodón. "Este tejido permite una mejor ventilación y reduce el riesgo de infecciones", señala la sexóloga y ginecóloga.
4. Micción frecuente. Orinar a menudo ayuda a expulsar las bacterias del tracto urinario. Por ello, lo mejor es no retener la orina durante largos períodos. "Es importante vaciar la vejiga completamente cada vez que se siente la necesidad", recalca la doctora.
5. Evitar productos irritantes. Evite el uso de productos que puedan resultar irritantes para la zona íntima, duchas vaginales y otros productos, como los perfumados, que puedan alterar el equilibrio natural de bacterias en el área genital.
6. Vaciar la vejiga tras las relaciones sexuales. "Durante las mismas, las bacterias de la vulva ascienden hacia la vejiga. Al orinar se expulsan y disminuimos la posibilidad de infecciones".
Dieta anti cistitis
Además de las medidas higiénicas apuntadas, la experta añade otros consejos relacionados con la dieta. Así, recomienda el consumo de ciertos alimentos y complementos que pueden ayudar a prevenir la cistitis gracias a sus propiedades. En cualquier caso, cualquier decisión que afecte a la dieta debería ser consultada previamente a un profesional.
En primer lugar, los alimentos ricos en probióticos como el yogur pueden "ser beneficiosos para la salud urinaria", sugiere la especialista en salud de la mujer.
También los arándanos rojos son una excelente elección. "Los compuestos presentes en los arándanos, como las proantocianidinas, pueden impedir que las bacterias se adhieran a las paredes del tracto urinario". En este sentido, tomar zumo de arándano rojo en verano es perfecto para hidratarse y, de paso, protegerse de la cistitis.
Alimentos con alto contenido en vitamina C como las fresas, el kiwi, la naranja o los pimientos, también son una buena medida preventiva, ya que "la vitamina C acidifica la orina, lo que puede dificultar el crecimiento de bacterias".
Por último, la facultativa aconseja tomar D-Manosa. Este suplemento es un tipo de azúcar que se encuentra en pequeñas cantidades en las frutas y se ha demostrado que ayuda a prevenir la adherencia de las bacterias a las paredes de la vejiga. "Tomar complementos alimenticios de D-Manosa puede ser una estrategia adicional para quienes son propensos a infecciones urinarias recurrentes".