A menudo una persona desconoce que tiene osteoporosis hasta que sus huesos son tan débiles que cualquier golpe o caída le causa una fractura. Las más habituales son de vértebras, cadera y muñeca.
El test que revela si tus huesos están fuertes
Al perder masa ósea, el esqueleto se vuelve quebradizo. Las fracturas vertebrales, las más numerosas aunque no suelen doler, provocan pérdida de estatura y encorvamiento de la columna.
En cuanto a las fracturas de cadera, son las más graves y siempre requieren hospitalización, mientras que las de muñeca suelen darse al principio de desarrollar la enfermedad, siendo una primera señal.
1. ¿Tu padre o tu madre han sufrido fracturas de mayores?
Existe un componente hereditario muy importante en esta enfermedad. Si tus padres o tus abuelos han tenido alguna señal de osteoporosis, como por ejemplo una fractura de cadera después de una pequeña caída, tú puedes tener más probabilidades de desarrollar la enfermedad.
2. ¿Tuviste la menopausia antes de los 45 años?
Si la menopausia ya aumenta el riesgo de osteoporosis, tenerla de forma precoz lo dispara aún más porque se pierde mucho antes la protección para los huesos que suponen los estrógenos. Ten en cuenta que estas hormonas juegan un papel crucial en el mantenimiento de un equilibrio saludable entre la destrucción y la regeneración ósea.
3. ¿Te has roto algún hueso tras una caída leve?
Una fractura de este tipo, en edad adulta y tras una caída de poca importancia, puede avisarte de que tus huesos han perdido densidad. No lo pases por alto.
4. ¿Has tomado alguna vez corticoides?
Algunos fármacos que los contienen, o bien derivados de la cortisona utilizados para el tratamiento de enfermedades respiratorias, reumáticas o de la piel pueden contribuir al debilitamiento de los huesos. El riesgo aumenta si se toman más de tres meses seguidos.
5. ¿A tus menús les falta la dosis correcta de calcio?
Este mineral es el principal componente del hueso. Por eso si tu dieta no lo aporta en la cantidad suficiente, tus huesos pueden resentirse, especialmente en la menopausia, cuando las necesidades son mayores.
6. ¿Apenas te da el sol?
La vitamina D es básica para que los huesos absorban el calcio y esta se activa con la exposición solar. Por eso, si apenas pasas tiempo al aire libre o siempre vas con protección solar muy alta, puede que sufras esa carencia.
7. ¿Estás muy delgada?
Las mujeres con huesos pequeños o delgados son más propensas a sufrir osteoporosis. También se sabe que un bajo Índice de Masa Corporal o pesar menos de 55 kilos aumenta el riesgo.
8. ¿No haces ejercicio?
Los expertos aconsejan 30 minutos de actividad física diaria para reforzar los huesos. Investigadores de la Escuela de Medicina de Icahn del Monte Sinaí (EE.UU.) descubrieron que durante el ejercicio los músculos liberan una molécula que aumenta la masa ósea de los huesos largos, los más usados durante el movimiento y más propensos a romperse.
9. ¿Fumas o bebes alcohol en exceso?
Los fumadores tienen mayor riesgo de osteoporosis que los no fumadores. Y es que fumar aumenta la pérdida de masa ósea, ya que interfiere en la absorción del calcio. Lo mismo ocurre si te pasas con el alcohol: si eres mujer no debes superar una copa al día.