El consejo de los psicólogos para mejorar las relaciones: "Es posible hacer ajustes en tu círculo para aumentar tu bienestar, sin que ello suponga romper relaciones importantes”

Todo empieza con una carcajada. Esa risa contagiosa que rompe el silencio y, sin darte cuenta, ya estás sonriendo tú también. Quizás era una broma sin mucho sentido o una anécdota tonta, pero algo en la energía de esa persona te hizo cambiar el estado de ánimo. Y es que, aunque suene a algo sin fundamento, no lo es: las emociones son contagiosas.

Lo que sientes no siempre nace de ti, sino de quienes te rodean. Compartir días enteros con alguien que siempre está de mal humor o con un grupo que se queja de todo. Por muy optimista que seas, tarde o temprano, su negatividad te va a alcanzar. Por el contrario, estar con alguien siempre encuentra una razón para reír o ve soluciones donde otros ven problemas, no solo te levanta el ánimo, también te hace más fuerte, más resiliente.

Ahí es donde entra en juego una teoría que, aunque nació en el ámbito del éxito profesional, ha demostrado tener un impacto en todos los aspectos de la vida: "Eres el promedio de las cinco personas con las que más tiempo pasas". Esta idea, atribuida al empresario y orador motivacional Jim Rohn, ha cobrado tanta relevancia que hoy no solo habla de riqueza o éxito, sino también de bienestar, salud mental e incluso de longevidad. ¿Cómo puede ser que tus cinco personas más cercanas estén afectando todo eso? La respuesta está en la ciencia.

la influencia del entorno en la salud

Los investigadores llevan años analizando cómo el entorno afecta a los hábitos y comportamientos. Resulta que no solo se heredan rasgos genéticos, también rutinas y actitudes.

¿Alguna vez te ha pasado que empiezas a salir con alguien que va al gimnasio y, casi sin darte cuenta, tú también te animas a ir? No es coincidencia. La Universidad de California descubrió que las personas activas tienden a rodearse de otras activas. No es solo por afinidad, es porque el hábito se contagia. De hecho, rodearte de personas que cuidan su salud puede motivarte a hacer lo mismo sin que nadie te lo pida. Es como si el simple hecho de estar con ellos te impulsara a mejorar.

Es pura imitación. Se ve lo que hacen los demás y, sin pensarlo, se replica. Esto es así no solo con el deporte, sino también la alimentación, la gestión del estrés y hasta al sueño.

el efecto espejo de las emociones

Las emociones se reflejan como en un espejo. Lorena Honrubia, psicóloga de Serendipia Psicología, explica a Saber Vivir que “las personas que nos rodean tienen un impacto significativo en nuestra vida", ya sea a través de "sus opiniones, comportamientos o incluso su energía". 

Eso les confiere el poder de "moldear nuestras creencias y hábitos de maneras que a veces ni siquiera lo notamos”. Por lo tanto, no es solo que te alegres cuando un amigo está contento, es que los nervios, la ansiedad o el optimismo también se pegan.

Por ejemplo, ¿te ha pasado salir de una reunión agotado sin razón aparente? Quizás no era el tema de conversación, sino la actitud de las personas con las que estabas. Investigadores de la Universidad de Ohio concluyeron que las emociones negativas tienen más impacto que las positivas. Es decir, es más fácil que el mal humor se contagie que la alegría. Así que si sueles rodearte de gente tóxica, cuidado: su pesimismo puede estar afectando tu salud mental.

se pega todo, lo bueno y lo malo

Honrubia señala que “es importante ser conscientes de a quiénes tenemos a nuestro alrededor" y buscar un círculo de personas que "nos inspiren y motiven”. Esto no solo aplica a las elecciones saludables. También funciona al revés: si tu círculo cercano tiene hábitos poco saludables, es fácil que tú también caigas en ellos.

Por ejemplo, si todos tus amigos prefieren quedarse en casa viendo series comiendo dulces y refrescos en lugar de salir a hacer ejercicio, tarde o temprano tú también elegirás el sofá. Y lo mismo ocurre con otros hábitos, como fumar o beber en exceso.

La buena noticia es que no todo está perdido. Cambiar de círculo o, al menos, añadir nuevas personas a tu entorno puede ayudarte a modificar esos hábitos que no te hacen bien.

Estrategias para crear un círculo positivo

¿Qué pasa cuando te das cuenta de que tu círculo cercano no te está beneficiando? No siempre es fácil cambiar de amigos o evitar a la familia. De hecho, no hay necesidad de ser tan drástico: "Es totalmente posible hacer ajustes en tu círculo cercano para mejorar tu bienestar, sin que ello suponga romper relaciones importantes". 

El primer paso para empezar a tomar medidas en favor del bienestar es hacerse un autoanálisis: "Es importante que sepas qué es lo que valoras y hacia dónde quieres ir para encontrar personas que encajen y aporten".

Una vez establecidas las líneas rojas, es posible empezar a poner límites emocionales. Esto no implica cortar lazos, sino aprender a protegerte de la negatividad. Si alguien cercano siempre se queja o te drena la energía, puedes limitar el tiempo que pasas con esa persona o cambiar el tema de conversación.

Otra estrategia es buscar influencias positivas fuera del entorno cercano. Puedes unirte a talleres en grupo, escuchar podcasts inspiradores o leer libros que te motiven. La idea es equilibrar las energías para no quedarte atrapado en un círculo que no te aporta.

Además, puedes convertirte en líder del cambio siendo proactivo. A veces, con pequeños gestos como proponer actividades saludables o tener una actitud optimista, puedes inspirar a tu círculo cercano a cambiar también.

Cómo construir un círculo de influencia positivo para tu bienestar

Si quieres construir un entorno que te impulse, lo primero es identificar qué tipo de personas te aportan valor. ¿Buscas motivación, apoyo emocional o inspiración creativa? Definirlo te ayudará a elegir mejor a quién dedicar tu tiempo. Además, no se trata solo de encontrar personas positivas, sino de mantener relaciones equilibradas. Dar y recibir en la misma medida crea lazos más fuertes y saludables.

También es fundamental estar dispuesto a salir de la zona de confort. No temas unirte a nuevos grupos o iniciar conversaciones con personas con las que nunca has hablado pero consideras que pueden ser buenas influencias. La psicóloga recuerda que hay que elegir bien, porque tu bienestar depende en gran medida de ello.

ERES EL PROMEDIO QUE QUIERAS

Como recalca Honrubia no se trata de dejar a tus amigos ni de cambiar a toda tu familia. Es más bien tomar consciencia de cómo te afecta tu entorno y aprender a gestionar esas influencias. Al final, tú decides quiénes forman parte de tu círculo y cuánto impacto tendrán en tu vida.

Porque sí, eres el promedio de las cinco personas con las que más tiempo pasas, pero también eres el promedio de cómo decides dejarte influir por ellas.