Cordyceps, el hongo medicinal chino: una promesa contra la fibrosis pulmonar

La fibrosis pulmonar idiopática se cobra cientos de vidas cada año sin que exista tratamiento eficaz para frenarla. Este reciente descubrimiento coloca a la comunidad médica un paso más cerca de hacerle frente.

Celia Perez León
Celia Pérez León

Redactora especializada en salud y nutrición

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codyceps sinensis

El cordyceps sinensis podría tener beneficios terapéuticos para la fibrosis pulmonar idiopática gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. 

Dificultad para respirar, tos seca persistente, fatiga, debilidad, pérdida de peso… Estos son solo algunos de los primeros síntomas de la fibrosis pulmonar idiopática, que acaba siempre con un resultado similar. Entre tres y cinco años después de su diagnóstico, la mayoría de los afectados fallece. La FPI es causa directa de muerte en cerca del 70% de quienes padecen esta enfermedad.

La medicina moderna no tiene cura para esta enfermedad progresiva y letal, por lo que la comunidad científica invierte tiempo, esfuerzo y medios para encontrar posibles nuevas vías de tratamientos. Los expertos del Instituto de Materia Médica de la Academia China de Ciencias Médicas, Huan Tang y Jigang Wang, han dado un gran paso en un estudio reciente que podría acercarnos hacia uno de los tratamientos más esperados de nuestros tiempos.

La fibrosis pulmonar idiopática

Como indica su nombre, la fibrosis pulmonar es una enfermedad idiopática. Es decir, que se desconoce qué la causa. Esto hace que diseñar tratamientos específicos sea toda una odisea, dado que no se entiende completamente que la origina.

A medida que la enfermedad progresa, pasando de la tos casual a un cuadro grave, el tejido pulmonar se engrosa y cicatriza, lo que dificulta la transferencia de oxígeno al torrente sanguíneo. La esperanza de vida a partir del diagnóstico es de 3 o 5 cinco años, en los que ningún tratamiento puede frenar el avance de la enfermedad.

La medicina actual se concentra en ofrecer tratamientos que alivian los síntomas y ralentizan la progresión de la enfermedad, pero no existe una cura para la fibrosis pulmonar. Algunos anfibrióticos pueden ralentizar la cicatrización, la oxigenoterapia ayuda a mejorar la respiración, y en los casos más graves el trasplante de pulmón se presenta como la única alternativa viable.

Al menos, por ahora. Porque Huan Tang y Jingang Wang, expertos del Instituto de Materia Médica de la Academia China de Ciencias Médicas, parecen haber dado con un posible tratamiento para la FPI.

Un hongo medicinal

El estudio se centraba en el cordyceps sinensis, un hongo parasitario que se encuentra principalmente en regiones montañosas del Tíbet y otras partes del Himalaya. En la medicina tradicional china y tibetana se lo considera esencial por sus capacidades antiinflamatorias y antioxidantes.

Es esta capacidad antioxidante, que inhibe el estrés oxidativo, la que capto la atención de los investigadores. En el estudio, demostraron como el cordycepso sinensis podía mitigar la inflamación pulmonar y la deposición de colágeno (que contribuye a la cicatrización pulmonar) en ratones con esta enfermedad.

Los datos que obtuvieron durante la investigación apuntan a que este hongo podría ofrecer un posiblemecanismo de protección contra la fibrosis pulmonar idiopática gracias a que regula la fosforilación oxidativa mitocondrial.

Vistas de esperanza hacia el futuro

Aunque el descubrimiento es, sin duda alguna, prometedor, los investigadores reconocen la necesidad de realizar más investigaciones. Deben descubrir cuáles son los componentes del cordyceps sinensis responsable de sus efectos terapéuticos, así como dilucidar los mecanismos en los que se basa su acción terapéutica.

No obstante, los hallazgos del equipo son muy prometedores. El cordyceps no solo reduce la producción de especies reactivas al oxígeno mitocondriales (que dificultan la respiración), sino que además mitiga el estrés oxidativo y la inflamación del pulmón al actuar sobre los complejos mitocondriales. Estos son los mecanismos que contribuyen al efecto terapéutico del hongo, por lo que, si las siguientes investigaciones salen según lo esperado, podríamos estar ante una prometedora alternativa para los pacientes que sufren esta debilitante enfermedad.