Dr. Manel Esteller, genetista: "El sur de Europa es uno de los puntos calientes para envejecer de forma saludable”

Podemos llegar a los 120 o 130 años. Lo asegura el catedrático de genética Manel Esteller. En los Diálogos para National Geographic explica varios factores que ayudan a ser longevos. La dieta y las condiciones de vida que tenemos en el sur de Europa son dos de ellos.

Pablo Cubí
Pablo Cubí del Amo

Periodista

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MUJER GUAPA MADURA CORRIENDO

Las condiciones de clima y dieta del sur de Europa favorecen la longevidad.

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España es un buen lugar para envejecer. Lo explica el doctor Manel Esteller, catedrático de genética, que lleva tiempo analizando los factores que hacen que unas personas vivan más años que otras.

La genética es importante. Las mujeres tienen mayores opciones que los hombres. Pero hay otros muchos factores que tienen más peso, sobre todo para que ese envejecimiento sea saludable. Lo importante no es solo vivir por vivir, sino que sean años en que no perdamos calidad de vida.

Uno de esos elementos fundamentales es el lugar en donde vivimos. En ese sentido, los españoles somos afortunados. “Hay varios lugares y el sur de Europa suele ser uno de los puntos calientes de envejecimiento elevado”, ha asegurado el doctor Esteller en una entrevista de los Diálogos para National Geographic.

Por qué en España vivimos más

Hasta este verano en España vivía la persona más longeva del mundo: Maria Branyas, una catalana que había cumplido los 117 años. No es la primera vez que un español encabeza la lista de personas más longevas.

Lo más significativo no es solo los años que vivió, sino su razonablemente buena salud física y mental para su edad, que le permitió disfrutar de una vida envidiable. ¿Por qué en unos países se vive más que en otros? Se cree que esto es debido a varios factores. El doctor Esteller enumera algunos:

  • La dieta: “La dieta mediterránea: carne magra, con aceite de oliva, con tomate… Todo esto ayuda”, dice. Empezamos no solo a alimentarnos mejor, sino más variado.
  • Un clima amable: “Los climas extremos se asocian a vidas más cortas”.
  • Las relaciones sociales: “Se ha visto también que las personas longevas tienen relaciones familiares muy buenas y muy ricas. Lo que seguramente tiene que ver con el envejecimiento saludable del cerebro”.
  • Los avances médicos: “También han ayudado a darnos más vida y más salud”.

Dónde está el límite de edad

A mediados del siglo XX, “nuestras abuelas podían darse por satisfechas si llegaban a los 70 años, hoy cada vez será más frecuente encontrar personas de 110 años”, nos explicaba el doctor Esteller.

Las tortugas llegan a vivir dos siglos y hay tiburones centenarios. “No parece descabellado que el ser humano ralentice su reloj molecular y superar los 120 o 130 años”, añadía.

La ciencia ha comprobado que una de las claves de nuestra vida celular son los telómeros. Son una especie de fundas que hay al final de las cadenas de ADN en el núcleo de las células. Cada vez que se divide la célula, estos telómeros se hacen más cortos. Si ya de entrada son cortos, puede ser un indicativo de vida más corta.

Pero no es una regla matemática. Hay factores contrastados científicamente que influyen para que esos telómeros se acorten o que aceleran el proceso: la polución, los microplásticos, el estrés excesivo y la mala alimentación. “Todo ello provoca que nos oxidemos”, decía el doctor Esteller.

Vivir más años con más salud

Por tanto, si evitamos todos estos factores que envejecen las células podemos estar añadiendo años de vida. Pero eso no basta. Lo que hemos de plantearnos también es qué clase de vida queremos.

Tan importante como la longevidad es que esos años añadidos sean de calidad. Que podamos hacer las cosas que nos gustan. Levantarnos cada mañana y ver que no somos simplemente una carga para otros. “Hemos de sumar vida a los años y no años a la vida”, recordaba el doctor Esteller.

Vivir más con salud depende en gran medida de nuestros hábitos. A los ya mencionados cabe añadir uno importante: la actividad física. Los estudios sobre las personas longevas han revelado que es básico. No hay que dejar de moverse se tenga la edad que se tenga.

Cómo evitar que el cerebro envejezca

¿Y qué pasa con nuestro cerebro? Enfermedades neurodegenerativas, en especial el alzhéimer, casi una desconocido cuando no había tantos longevos, se han convertido en uno de los grandes retos de la sanidad.

Aún no se sabe curar el alzhéimer. Ni siquiera tenemos la certeza de qué lo causa. Sí sabemos que la vejez es un factor de riesgo. Sin embargo, no todos los ancianos tienen algún grado de demencia. Hay gente muy mayor perfectamente lúcida. Eso ha dado pistas a los científicos.

El alzhéimer no es una simple lotería. La gente que ha cuidado la dieta y ha sido activa tiene un 40% menos de riesgo de padecerlo. Así que, mientras se sigue buscando una cura, “la única y mejor protección es llevar un estilo de vida sano del que se beneficien igualmente las neuronas”, recomienda el doctor Esteller.