Muchas veces, la costumbre o la falta de tiempo hacen que acabemos recurriendo a los mismos platos de siempre. Sin embargo, no hay que complicarse mucho la vida para tener una comida o una cena diferente y original, digna de un gran chef.
Con ingredientes sencillos que seguramente tienes en casa puedes crear deliciosos platos como el flan de zanahoria que te proponemos hoy. Además, al añadirle cúrcuma, que tiene un sabor muy particular y es un poderoso antiinflamatorio natural, tendrás un entrante muy saludable y delicioso. ¡Toma nota de cómo elaborarlo!
Receta de flan suave de zanahoria con cúrcuma
Si quieres una receta fácil, ligera y con un sabor sorprendente, no puedes dejar de preparar este flan de zanahoria con cúrcuma. Delicioso y saludable, lo puedes disfrutar tanto frío como caliente.
Une el sabor dulzón de la zanahoria con el toque ligeramente picante de la cúrcuma para crear una combinación muy original que puede servir tanto para una comida de diario como para sorprender a tus invitados estas Navidades. Además, su textura suave y ligera gustará tanto a mayores como a pequeños.
Ingredientes (para 6 personas, en función del tamaño de los moldes):
- 8 zanahorias grandes
- 1 puerro grande
- 250 ml de leche (preferiblemente entera)
- 3 huevos grandes
- 1 cucharadita de cúrcuma
- Aceite de oliva virgen extra (para saltear las verduras y engrasar los moldes)
- Sal y pimienta al gusto
Preparación paso a paso:
- Lava las zanahorias bajo el grifo, frótalas o ráspalas para eliminar toda la suciedad y, cuando estén bien limpias, córtalas a trozos.
- Lava bien el puerro para eliminar toda la tierra que pueda tener y, a continuación, córtalo en rodajas.
- En una cacerola, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio y rehoga el puerro y la zanahoria hasta que la segunda esté completamente tierna, aproximadamente de 10 a 15 minutos. Ve revolviendo de vez en cuando para evitar que se peguen a la cacerola.
- Retira las verduras del fuego, déjalas enfriar un poco y sazónalas con la sal, la pimienta y la cucharadita de cúrcuma (puedes ajustar al gusto, si prefieres que esté más o menos intenso de sabor).
- Añade los 250 ml de leche y los 3 huevos cascados y tritúralo todo junto con la ayuda de una batidora hasta que quede una mezcla suave. A continuación, puedes pasarla por un colador para evitar que te queden trozos grandes.
- Engrasa los moldes individuales de flan aptos para horno con un poco de aceite de oliva y rellénalos con la mezcla.
- Coloca los moldes en una fuente grande apta para horno en la que verterás con cuidado agua caliente hasta que llegue a la mitad de los lados de los moldes para hornear los flanes al baño maría durante unos 35 minutos a 160 °C, o hasta que los estén listos (puedes comprobarlo insertando un palillo y viendo si sale limpio).
Retira los flanes del horno y sírvelos calientes o fríos, como prefieras, decorados con una ramita de cebollino o perejil.
El poder antiinflamatorio de la cúrcuma
Los ingredientes que conforman este delicioso flan nos aportan diversas vitaminas (como la A, la C, la B6 o la E), minerales (calcio, hierro, potasio, magnesio...) y antioxidantes, pero por si algo destaca es por el poder antiinflamatorio de la cúrcuma, una especia con múltiples beneficios para la salud.
Cada vez hay más evidencia científica que respalda la inclusión habitual de esta especia dorada originaria de la India en nuestros platos, especialmente gracias a su contenido en curcumina, su principal componente activo. Algunos la describen incluso como un ibuprofeno natural.
La curcumina es una sustancia de poderoso efecto antiinflamatorio que convierte a la cúrcuma en un ingrediente muy interesante en caso de enfermedades con un componente inflamatorio como la artrosis, la artritis reumatoide o la enfermedad inflamatoria intestinal, entre muchas otras.
La cúrcuma es, además, rica en antioxidantes, que ayudan a neutralizar los radicales libres en el cuerpo y pueden retrasar el envejecimiento y reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
Eso sí, para absorber bien la curcumina, hay que combinarla con pimienta negra y gasas saludables (como el aceite de oliva), tal como se hace en la receta de flan de zanahoria que te acabamos de detallar.