El mundo podría dividirse en dos grandes grupos: las personas que hacen sentir bien a los demás; y aquellas, que provocan emociones desagradables entre quienes les rodean. A estas últimas, se les podría llamar, personas tóxicas, ya que igual que hay determinadas sustancias que dañan el organismo, estas personas son capaces de alterar aquello que tocan con su negatividad.
Por tanto, es clave detectar quiénes son esas fuentes de malignidad. Algo, que puede no resultar sencillo, ya que requiere tiempo y atención. Es más, por increíble que parezca, en no pocas ocasiones, esa persona tóxica de la que hablamos somos nosotros mismos, y no somos conscientes de ello.
¿Y si tengo una persona tóxica a mi lado?
Los efectos de una persona tóxica en nuestra salud mental son todo menos buenos. Sus comentarios, actitudes y comportamiento pueden ir minando la autoestima, confianza y estado de ánimo de su "víctima" lentamente, sin que apenas lo detecte. Ahora bien, una vez identificada la persona tóxica, los expertos recomiendan por unanimidad que nos alejemos de ella lo antes posible. "Si es una persona tóxica con todos (tóxico universal), lo mejor es tomar distancia", afirma rotunda a Saber Vivir, la doctora Marian Rojas Estapé, psiquiatra y autora de Encuentra tu persona vitamina (Espasa).
Y es que, a pesar de que, según la experta, "no hay personas tóxicas, sino personas que nos intoxican de cortisol y que nos meten en modo alerta", hay que tener cuidado, ya que "si dejamos que este tipo de persona nos influya, les estaremos dando un poder inmenso en nuestra salud física y psicológica".
rasgos que confirman lo que sospechabas
Hemos visto cómo el objetivo es marcar distancia con el foco de toxicidad, es decir, con aquella persona que no nos hace bien y que, en definitiva, no nos aporta nada que merezca la pena aprehender. Ahora bien, en este punto, la cuestión que aflora sería saber cómo identificar este tipo de persona.
Para ello, la psiquiatra describe algunos de los rasgos de este tipo de personas que pueden resultar muy prácticos a la hora de descubrirlas: "Invaden nuestro espacio y conversaciones. Son negativos, suelen juzgar nuestra vida, lo que opinamos y hacemos; y nos hacen sentir irritables, tristes y sin energía".
Además, "ese individuo sufre y comparte su tensión y angustia con los demás. Si solo es así contigo -continúa la experta- y no puedes alejarlo, analiza qué te irrita y por qué te altera tanto". "Y no tengas miedo a perdonar", añade.
frases que las delatan
Además del comportamiento que apunta la psiquiatra, existen determinadas afirmaciones que cuando los escuchas a menudo, dejan de ser un simple comentario. Se trata de frases tóxicas que poco a poco van destruyendo la autoestima del que las recibe. La psicóloga de Harvard, Cortney Warren, ha estudiado en profundidad este asunto y alerta de las frases que utilizan este tipo de personas.
Además, la experta no solo menciona algunos ejemplos de este tipo de frases, también apunta posibles respuestas. Y es que, una buena reacción es aquella que pone límites. Así, la doctora Warren revela las 6 frases tóxicas más frecuentes y cómo debes responder.
1. "Estás haciendo una locura"
Poner en entredicho la lucidez de la otra persona es uno de las estrategias más frecuentes entre las personas tóxicas. Comentarios del tipo, "estás haciendo o vas a hacer una locura" menoscaban tu autoestima y te hacen dudar de tus decisiones.
Ante esta situación, la psicóloga aconseja reaccionar con frases del tipo: "Por favor, no cuestiones mi capacidad para tomar decisiones" o "incluso si no te parece bien, esto es lo que yo pienso".
2. "Estás exagerando"
Con frases de este tipo, en realidad lo que están haciendo es insinuar que tus preocupaciones son infundadas, y que tu realidad no es la correcta.
La respuesta que sugiere la experta va en esta línea: "Te parezca bien o no, así es como me siento, y eso no es exagerar" o "cuando dices que exagero estás juzgando mis sentimientos, que son solo míos".
3. "¡Era solo una broma!"
Es la típica frase que sigue a un comentario fuera de lugar o de menosprecio. Con ella, tratará de que pienses que eres demasiado sensible cuando en realidad el problema es el comentario que te acaban de hacer.
Dos de las repuestas que puedes dar son: "Ese comentario puede parecerte divertido a ti, pero a mí no" o "no me pareció que estuvieras bromeando y te agradecería que no me hablaras de esa manera".
4. "Tú me obligaste a hacerlo"
Una de las actitudes clásicas de las personas tóxicas es "echar balones fuera". Cuando algo no le sale bien, suele echarle la culpa a los demás.
Esta es una de las respuestas que puedes dar: "En realidad yo no puedo obligarte a hacer nada".
5. "Si me quisieras harías esto por mí"
Una reacción que, perfectamente, se puede catalogar como chantaje emocional. Es la típica frase de pareja tóxica cuando no haces lo que ella quiere y trata de hacerte sentir culpable al decirte que no te preocupas por ella.
Posible respuesta: "No me siento cómodo haciendo esto. Te digo, no te pido, que respetes mis límites".
6. "Te lo digo porque te quiero"
Así justifican sus comentarios las personas tóxicas. Intentan avalarlos con un mal entendido amor.
¿Cómo parar ese tipo de comentarios? "Sé que me quieres, pero no estoy de acuerdo con la forma en que me hablas" o "así no es como quiero que me muestren amor".