El Feng Shui es un arte ancestral china basada en crear condiciones ambientales que mejoren el bienestar de las personas que ocupan ese entorno. Aunque se considera una ciencia de la organización y la decoración, y en los países orientales se le da un importante valor cultural, no hay unas claras evidencias que lo avalen.

Los psicólogos ambientales admiten, no obstante, que sí tiene efectos. No hay evidencias globales, pero algunas de sus reglas y principios sí tienen un respaldo científico y muestran que son beneficiosas para la salud de las personas.

Por eso no hay que dejar pasar los consejos que da un experto japonés, con cientos de miles de seguidores en redes, que da algunos consejos útiles para conseguir que tengamos algo más de felicidad en nuestra vida. Se trata del profesor Mizuno Zoro Akihito. En concreto, el más aplaudido y compartido es uno que nos habla de la limpieza de la casa.

La ciencia detrás del Feng Shui

Entrar a descifrar todos los aspectos del Feng Shui sería muy largo y excede en mucho la ambición de este artículo. Nos vamos a limitar a resumir cuatro principios que puede resultarte más positivos en tu propósito de mejorar la sensación de alegría y bienestar. Todos estos aspectos tienen un respaldo científico:

• Ordena y busca luz natural. Centrarse en espacios de trabajo con ventanas que nos proporcionen luz natural mejorarán la productividad. Igualmente, los espacios ordenados permiten una mejor concentración que los lugares donde se acumulan objetos. La sensación de caos empeora también el estado de ánimo.
• Conecta con la naturaleza. Las estancias con elementos naturales tienen efectos beneficiosos sobre la salud mental. Si estamos en un entorno natural conseguimos mayor tranquilidad.
• El color también importa. La elección de colores que recuerden elementos de la naturaleza es otro de los principios del Feng Shui. En eso coincide con la neurociencia. Los colores y la distribución tienen impacto en cómo percibimos el espacio y cómo nos afecta.
• Crea espacios más ‘dialogantes’. Los espacios diáfanos que facilitan la comunicación entre las personas ayudan al bienestar. Las relaciones sociales, en familia o laborales, son uno de los pilares de la felicidad.

Ten el lavabo siempre limpio

Al hablar de orden también hemos de hablar de limpieza. La limpieza es importante en el Feng Shui porque un espacio sucio se considera un espacio caótico y desagradable. En esto no hay que ser un experto para darse cuenta.

Sin embargo, el profesor Akihito señala con especial importancia a una zona en concreto: el cuarto de baño. Insiste en que lo limpiemos a diario, no solo por higiene, sino porque ayuda a aportar éxito a las personas que lo hacen.

Señala que la limpieza mejora el flujo de las energías positivas del hogar. Y en el caso concreto del inodoro, afecta de forma muy directa a la claridad mental. Si tenemos una mentalidad abierta y despejada, podremos tomar decisiones más acertadas. Por consiguiente, hay más opciones de que nuestra vida sea más exitosa y feliz.

Algunas figuras ilustres japonesas han admitido que siguen el ejemplo. Es el caso del conocido director de cine Takeshi Kitano, o de empresarios como el fundador de Panasonic, Konosuke Matsushita, o el de Honda, Soichiro Honda. Aseguran que limpiar el inodoro a diario les ha podido ayudar en su éxito.

Las buenas vibraciones del baño

El profesor Aki, como se le llama popularmente, dice que limpiar el baño le ha traído suerte. No se puede negar una cosa: el vídeo donde explica esto es el más visto con diferencia de los que ha publicado. Él lo atribuye a un karma muy positivo.

En Japón hay un concepto, el intoku, que significa hacer cosas positivas pero en secreto. Realizar buenas acciones sin presumir de ellas, solo para ti. Y una de las acciones que realiza el profesor Aki, y al parecer otros practicantes, es limpiar no solo tu lavabo sino los lavabos públicos.

Explica que esto te da buen karma. Están convencidos de que trae buenas vibraciones. Por ejemplo, te permite conocer gente que celebra tu gesto y (quién sabe) pueden aportarte algo a tu vida.

La limpieza está muy arraigada en el país nipón. Y los baños públicos japoneses tienen fama por su sofisticación y por su higiene. Es muy distinto de la idea que tenemos por aquí. Por eso, este tipo de propuestas no han de sorprender tanto.

De hecho, hay una película que si no has visto es muy recomendable. Se trata de ‘Perfect days’ del director Wim Wenders. Explica el día a día de un hombre que trabaja limpiando los lavabos públicos de Tokio. Pero es ante todo un canto a la felicidad y a cómo encontrarla en las pequeñas cosas.

Así que, anímate a seguir el consejo del profesor Aki. Cada mañana, después de usar el baño, límpialo a fondo. Sabemos que el tiempo que dura limpio no va a ser mucho, por eso ha de ser una tarea diaria. Sin embargo, la sensación que da que cada día quede impoluto te va a cambiar. Pruébalo.