El dolor de garganta es uno de los síntomas más habituales de los resfriados y las gripes (y también de la Covid-19). Ocurre por la irritación o inflamación de la mucosa que recubre la garganta y puede acompañarse de tos, afonía, congestión nasal, fiebre o dolor de cabeza.
Esta sensación de ardor o picor en la parte posterior de la garganta (la faringe), que se conoce también como faringitis, puede ser muy molesta y dificultar actos habitualmente tan sencillos como tragar o comer. Normalmente desaparece en unos días, pero hay diversos remedios que pueden ayudarte a aliviar las molestias, como las gárgaras. Te explicamos cómo hacerlas para que sean realmente efectivas.
Cómo ayudan las gárgaras
Las gárgaras son uno de los remedios tradicionales que más se recomiendan para aliviar el dolor de garganta. La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), por ejemplo, recomienda hacer gárgaras de agua con sal. Pero ¿cuál es su efecto sobre el dolor? ¿por qué pueden ayudar?
Lo cierto es que hay pocos estudios que hayan analizado el efecto de las gárgaras con agua salada sobre el dolor de garganta debido a virus respiratorios:
- Un estudio de 2019 llevado a cabo por investigadores del Departamento de Otorrinolaringología de Centro Médico Universitario de Malaya (Malasia) y realizado en 100 personas indicó que hacer gárgaras con una solución de sal puede reducir el dolor de garganta en pacientes con faringitis no bacteriana.
- Otro pequeño estudio del año 2022 llevado en 60 personas a las que se había practicado una intubación endotraqueal (algo que suele provocar irritación y dolor en la garganta) indico que hacer gárgaras con una solución salina tibia sí podía aliviar el dolor de garganta.
Por otro lado, de lo que sí hay una mayor evidencia científica es de el papel de las gárgaras (y en concreto de la sal) para la prevención del contagio de virus.
El efecto beneficioso de las gárgaras con agua salada reside en el papel de la sal, que ayuda a extraer el líquido de los tejidos de la garganta y crea una barrera que impide que el agua y los patógenos dañinos vuelvan a entras. Así, las gárgaras alivian la inflamación y bloquean los virus y bacterias.
Además, el solo gesto de hacer gárgaras ya ayuda a eliminar la mucosidad acumulada en la garganta, con lo que puede reducir la tos, uno de los factores que más irritación provocan en la garganta. En cualquier caso, se trata de un remedio simple, inofensivo y muy económico para aliviar los casos leves de dolor de garganta.
Cómo hacer gárgaras para el dolor de garganta
La indicación de la semFYC es hacer gárgaras disolviendo una cucharadita de sal por vaso de agua.
Hay que sorber un poco de la solución, inclinar la cabeza hacia atrás y hacer gárgaras hacia la parte posterior de la garganta durante unos 30 segundos. Después, hay que escupir el líquido, pues tomar demasiada sal ç, además de ser perjudicial para la tensión, puede favorecer la deshidratación, algo nada conveniente cuando estamos resfriados.
Se puede repetir el proceso diversas veces al día. Y, si no es suficiente para aliviar el dolor de garganta, se puede combinar con otras medidas o remedios caseros. La SEMFyC recomienda:
- Una buena hidratación.
- Chupar caramelos sin azúcar.
- Paracetamol o ibuprofeno cuando hay fiebre o dolor (con la dosis que recomiende el médico).
Además, hay que evitar el tabaco, que es un gran irritante de las mucosas de la garganta.
Claves para que las gárgaras sean más eficaces
Por lo general, se recomienda que el agua que se use para hacer las gárgaras sea tibia. El agua caliente ayuda a que la sal se disuelva, pero hay que dejarla reposar un rato antes de hace las gárgaras porque si está demasiado caliente puede quemar o irritar los tejidos de la garganta, lo que empeorará el dolor.
El agua demasiado fría, aunque adormece la garganta y ser un alivio temporal, también puede tensar los músculos y aumentar el malestar.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que las personas con la tensión arterial alta no conviene que hagan gárgaras con agua salada, pues es bien conocido que la sal puede aumentar aún más la tensión arterial.
Una alternativa a las gárgaras con agua salada, que recomienda la Osakidetza (el Servicio Vasco de Salud), son las gárgaras con agua, miel y limón varias veces al día para aliviar las molestias al tragar.
Cuándo consultar al médico por un dolor de garganta
Por lo general, el dolor de garganta debido a un virus respiratorio desaparece en unos pocos días, pero en ocasiones puede indicar una faringitis crónica o u otra enfermedad (desde una alergia al reflujo gastroesofágico) y conviene buscar atención médica para averiguarla y tratarla de forma adecuada.
Estas son las señales que indican que debes acudir al médico:
- Cuando el dolor de garganta dura más de dos semanas.
- Si los síntomas no mejoran o el dolor empeora.
- Si aparece fiebre.
- Si los ganglios linfáticos están inflamados y no mejoran.