Heather Moday, inmunóloga: "Hay 5 alimentos que siempre trato de agregar a mi dieta para tener un sistema inmunológico fuerte y saludable"

Fortalecer nuestro sistema inmunitario es esencial en los meses de frío, cuando los virus respiratorios circulan más, aunque no debe limitarse a esta época del año. Mantener unas defensas fuertes es clave durante todo el año para protegernos eficazmente contra las enfermedades y los agentes patógenos y la alimentación desempeña un papel esencial. 

Nuestro cuerpo necesita un suministro adecuado de nutrientes, que incluya vitaminas, minerales, fibra y ácidos grasos saludables, entre otros componentes, para crear una barrera efectiva contra posibles invasores dañinos. Es por ello que uno de los principales secretos para tener un sistema inmunitario fuerte radica en adoptar una alimentación equilibrada y diversa. 

Además, es fundamental complementar esta dieta con un estilo de vida activo, un descanso adecuado y una buena gestión del estrés. Estas prácticas combinadas son la clave para mantener nuestras defensas en óptimas condiciones, independientemente de la estación del año en la que estemos.

Superalimentos que refuerzan las defensas

La doctora Heather Moday, inmunóloga y médico de medicina funcional, sostiene que una alimentación rica en vitaminas, minerales y nutrientes esenciales es fundamental para fortalecer nuestro sistema inmunológico. 

Sin embargo, asegura que “algunos alimentos destacan del resto por sus propiedades beneficiosas.” En su práctica profesional, la Dra. Moday ha identificado cinco alimentos excepcionales: “son los 5 superalimentos mágicos que siempre trato de agregar a mi dieta para tener un sistema inmunológico fuerte y saludable". Los repasamos a continuación.

Cúrcuma

La cúrcuma se ha convertido en un auténtico fenómeno en el mundo de la nutrición y la salud en los últimos años. Y no es para menos porque esta especia de color dorado tiene múltiples propiedades medicinales gracias especialmente a su principal compuesto activo, la curcumina. 

La inmunóloga destaca, entre sus beneficios, que su consumo ayuda a reducir los niveles elevados de cortisol hasta suprimir cambios inmunitarios relacionados con enfermedades autoinmunes, e incluso reducir la inflamación crónica generalizada.

También promueve el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas y, gracias a su potente acción antiinflamatoria, ayuda a aliviar la inflamación articular en la artritis reumatoide, lo que es particularmente relevante para mujeres mayores de 50 años, que tienen un mayor riesgo de desarrollar artritis reumatoide.

A pesar de sus numerosos beneficios, la curcumina no se absorbe bien en el tracto gastrointestinal. Por esta razón, la experta sugiere que la suplementación es la forma más efectiva de aprovechar sus propiedades y recomienda una dosis diaria de aproximadamente 1.000 miligramos de suplementos de cúrcuma para obtener resultados óptimos, aunque siempre es aconsejable consultar con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier régimen de suplementación.

Setas

Algunas setas destacan por sus extraordinarias propiedades inmunomoduladoras. Entre ellos, el maitake, el shiitake y el reishi son auténticas joyas que contribuyen al fortalecimiento de nuestras defensas:

• Maitake: potencia la producción de citoquinas Th1, lo que mejora la respuesta del organismo frente a infecciones bacterianas.
• Shiitake: su consumo regular puede fortalecer las defensas contra agentes virales y contribuir a la lucha contra células cancerosas.
• Reishi: ha demostrado ser particularmente eficaz en la estimulación de la respuesta inmunitaria específica contra el virus del herpes.

Brotes de brócoli

Los pequeños brotes verdes de brócoli son una verdadera joya nutricional, principalmente debido a su alto contenido de sulforafano, un compuesto bioactivo que actúa como un auténtico entrenador para nuestro sistema inmunitario: incrementa significativamente los niveles de diversos compuestos antioxidantes y potencia las defensas naturales de nuestro cuerpo.

Un dato sorprendente es que los brotes jóvenes de brócoli contienen entre 10 y 100 veces más sulforafano que el brócoli maduro.

Para aprovecharlos al máximo, es recomendable comerlos crudos, por ejemplo, en ensaladas.

Ajo

Seguro que no te sorprende que el ajo figure en esta lista de superalimentos. Este bulbo, con una larguísima historia en la gastronomía y la medicina tradicional, ha demostrado científicamente su valor como potenciador de la salud.

Numerosos estudios han revelado un amplio abanico de propiedades beneficiosas del ajo. No solo fortalece el sistema inmunitario, también tiene acción antiinflamatoria y protege la salud del corazón.

Además, el ajo favorece la salud intestinal al incrementar los niveles de bacterias beneficiosas como Lactobacillus, un probiótico natural, y tiene una triple acción antimicrobiana: posee propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas.

Jengibre

Entre los alimentos que destacan por sus propiedades beneficiosas para el organismo, el jengibre ocupa un lugar privilegiado. Esta raíz, conocida por su sabor picante y aromático, es mucho más que un simple condimento culinario.

Tiene potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios y contiene unos compuestos bioactivos llamados gingeroles que protegen órganos vitales como el hígado y el corazón.

Además, es especialmente eficaz para combatir las náuseas y otros malestares digestivos.

Existen múltiples formas de disfrutar de los beneficios del jengibre: puedes añadirlo fresco a tus platos favoritos, incorporarlo en batidos y smoothies o preparar infusiones o tés de jengibre.