María Real Capell, nutricionista: "La falta de vitamina D puede ralentizar la capacidad del cuerpo para quemar calorías"

La vitamina D participa en muchos procesos del cuerpo, entre ellos la regulación del metabolismo. Por eso la carencia de esta vitamina puede dificultar la pérdida de peso.

María Real Capell
María Real Capell

Farmacéutica, nutricionista y psiconeuroendocrina

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud y nutrición

Actualizado a

Mujer tomando sol invierno
ISTOCK

Si has hecho mil dietas pero no consigues bajar de peso, es posible que te falte vitamina D. Esta vitamina esencial para el cuerpo humano desempeña un papel crucial en el metabolismo, y unos niveles bajos podrían estar interfiriendo en tus objetivos de pérdida de peso.

María Real Capell, farmacéutica, nutricionista y especialista en psiconeuroendocrinología, explica a Saber Vivir que la deficiencia de vitamina D puede ralentizar la capacidad del cuerpo para quemar calorías. Además, esta vitamina desempeña un papel importante en la función muscular y en la salud de los huesos, aspectos fundamentales para mantener un estilo de vida activo y realizar la actividad física necesaria para el control del peso.

Aunque la deficiencia de vitamina D no es la única solución para la pérdida de peso, puede ser un factor relevante que impide que adelgaces al ritmo deseado. Los niveles de vitamina D se comprueban con un análisis de sangre.

Por qué la vitamina D afecta al peso corporal

La vitamina D es en realidad una vita-hormona porque hace más el papel de una hormona que de una vitamina. Las hormonas son sustancias químicas cuya función es básicamente reguladora.

Entre las funciones que realiza la vitamina D, una de ellas es la de regular el metabolismo de las hormonas que influyen en el peso corporal como la insulina. Cuando hay picos de glucosa circulando en sangre, la insulina es la encargada de repartirla a los tejidos para aportarles energía.

Así pues, la vitamina D mejora tu resistencia a la insulina, evitando que tengas un índice glucémico alto (una subida de glucosa en sangre) que provoca inflamación. De hecho la vitamina D es también antiinflamatoria.

Por qué las personas con sobrepeso tienen menos vitamina D

"Las personas con sobrepeso, al tener más grasa, tienen la vitamina D 'secuestrada'. Por eso la mayoría presentan un déficit de vitamina D en sangre", señala María Real Capell.

La vitamina D se almacena en tejidos grasos porque es liposoluble. Así pues, cuanta más grasa tengas, más vitamina se acumula en las células adiposas y menos en sangre. "Esto es un pez que se muerde la cola", explica la farmacéutica:

  • Si tienes sobrepeso hay menos vitamina D circulando en sangre porque está retenida en el tejido graso.
  • Esto provoca resistencia a la insulina y un mal metabolismo energético.
  • Un mal metabolismo energético se refiere a que, cuando los alimentos pasan al intestino, aprovechas toda su energía o calorías y engordas más.
  • En este punto entra en juego también la microbiota. Se sabe que las personas que aprovechan más las calorías de los alimentos tienen más proporción de bacterias Firmicutes que de bacterias Bacteroidetes (estas dos bacterias son las más abundantes del intestino). Por si fuera poco, los niveles de vitamina D también influyen en la composición de esas bacterias intestinales. Un círculo vicioso que no facilita la pérdida de peso.

Cómo ayuda la vitamina D a peder peso

En resumen, unos buenos niveles de vitamina D contribuyen a la pérdida de peso a través de tres mecanismos:

  • Mejora la resistencia insulina.
  • Mejora también el metabolismo energético.
  • Favorece que tengas una composición de la microbiota propia de persona delgada (con más Bacteroidetes que Firmicutes).

Análisis de vitamina d antes De ponerte a dieta

María Real Capell asegura que las personas con sobrepeso deberían realizarse una analítica para comprobar los niveles de vitamina D antes de empezar el plan de adelgazamiento, que debe ser siempre bajo la supervisión de un profesional.

"He tenido muchos pacientes con obesidad a los que nunca les han mirado la vitamina D antes de ponerse a dieta", señala la farmacéutica, nutricionista y psiconeuroendocrina. Y unos niveles bajos de vitamina D pueden hacer muy difícil la pérdida de peso.

"Si la analítica indica que los niveles están bajos lo ideal es recurrir a suplementos que combinen la vitamina D con la K (esta última ayuda a que la vitamina D se reparta bien en los tejidos y mejore también la microbiota)", explica la especialista.

Además de facilitar la pérdida de peso, la vitamina D reducirá la sensación de fatiga. La personas obesas suelen estar más cansadas justamente porque tienen niveles bajos de vitamina D en sangre. Por eso son más reticentes a hacer ejercicio.

Pero cuando comprueban que su energía aumenta se animan a hacer ejercicio, señala María Real Capell.

Lo ideal es tener unos niveles de vitamina D por encima de 30 nanogramos por ml de sangre.

No olvidemos que la vitamina D se obtiene básicamente de la exposición solar, aunque si hay un déficit es muy difícil conseguirlo solo tomando el sol sin poner en riesgo la salud de la piel.

La recomendación es tomar el sol 20 minutos al día sin protección evitando en verano las horas de mayor radiación, que son las centrales del día.