¿Es el método pilates un ejercicio de fuerza? Solo si lo haces de la manera que recomienda esta instructora

Practicar Pilates de forma habitual proporciona numerosos beneficios para la salud. Entre ellos, mejora la flexibilidad, la postura y la movilidad. Pero ¿y la fuerza? ¿Mejora también la musculatura corporal?

Judith Vives
Judith Vives

Redactora especializada en salud y bienestar

Actualizado a

pilates colchoneta mat pilates

El método Pilates ayuda a mejorar la flexibilidad, la fuerza y el equilibrio.

Istock

El método pilates es conocido como un ejercicio que mejora la flexibilidad, la postura y la movilidad, pero ¿se considera también un trabajo de fuerza?

Los instructores de pilates aseguran que este método, que tiene una tradición centenaria, no se centra solo en la fuerza muscular convencional, sino también en la flexibilidad y otros aspectos y que tiene un enfoque más equilibrado y consciente

Por esta razón, se puede considerar un ejercicio de fuerza, pero con algunos matices, tal y como explica Rosa Maria Masia, profesora de pilates y directora del estudio City Pilates Barcelona.

El pilates como trabajo de fuerza

Masia explica que, según la metodología clásica de pilates, sí que podemos considerarlo un ejercicio de fuerza. Esto es porque, en primer lugar, se trabaja con la fuerza del propio cuerpo, pero también con máquinas que tienen resistencias o muelles. 

Al utilizar estas resistencias, se realiza un trabajo que involucra la fuerza. Sin embargo, este trabajo de fuerza no sigue la misma lógica del entrenamiento tradicional, donde el objetivo, mediante levantamiento de pesas, es aumentar la masa muscular (hipertrofia).

El pilates, por el contrario, "está basado en un trabajo consciente y controlado que devuelve al cuerpo a su estado natural y saludable". Dicho de otra forma: "no se trata solo de levantar pesas, sino de mejorar el uso y el movimiento del cuerpo", añade. 

Estirarse y moverse primero

La instructora de pilates indica que no se puede exigir a todas las personas que practican pilates que trabajen directamente la fuerza o lo hagan de la misma manera. El pilates está abierto a muchas tipologías de personas, desde gente mayor, personas con poca flexibilidad, embarazadas, y con otros muchos condicionantes físicos diferentes.

Por eso, es importante empezar siempre con estiramientos y mejorar la movilidad general antes de empezar a trabajar la fuerza.

El trabajo de pilates debe ser personalizado. Cada persona tiene necesidades diferentes, y por eso es fundamental "adaptarse a lo que cada cuerpo necesita, ya sea más fuerza o más estiramiento", explica Masia. El objetivo es conseguir que los músculos puedan contraerse y estirarse adecuadamente, lo que mejora la movilidad y el rango articular.

Fuerza y flexibilidad en equilibrio

Uno de los aspectos clave del pilates es el equilibrio entre fuerza y flexibilidad. Para Masia, el trabajo en pilates se enfoca en la movilidad articular, lo cual es clave para evitar lesiones. 

Además de trabajar la fuerza, se busca mantener la flexibilidad articular. "La clave está en fortalecer sin perder el rango de movimiento", explica, algo que en los entrenamientos convencionales puede llevar a una reducción del rango de movimiento si no se equilibra adecuadamente.

Principios básicos del pilates

Tal y como explican en Movimiento Pilates, escuela de formación profesional para entrenadores de pilates, esta actividad se basa en una serie de principios fundamentales que guían la práctica:

  1. Concentración: Estar presente en cada movimiento y ser consciente de lo que está sucediendo en el cuerpo.
  2. Centro de fuerza: El trabajo se centra en el core (zona abdominal y lumbar), también conocido como la "casa de la fuerza" o power house.
  3. Respiración: Un elemento básico para optimizar los movimientos y facilitar la circulación de oxígeno a los músculos.
  4. Control: Controlar los movimientos para asegurar que se realicen de forma precisa y eficaz.
  5. Fluidez del movimiento: Los movimientos deben ser fluidos, sin brusquedad.
  6. Precisión: Realizar menos repeticiones, pero con más conciencia y precisión en cada una.

La "casa de la fuerza"

En pilates, un core o power house ("casa de la fuerza") fuerte es importante. Los movimientos controlados fortalecen esta zona y de allí se irradia la fuerza hacia el resto del cuerpo. Esto contribuye no solo a ganar fuerza, sino también flexibilidad y resistencia en los músculos.

Un core débil puede causar problemas en la columna, lo que puede llevar a lesiones y dolores. Así que, en pilates, la fuerza se concentra especialmente en esta área para garantizar que la columna y las extremidades funcionen correctamente.

Fuerza sin pesos

El pilates puede considerarse, pues, un ejercicio de fuerza, pero no en el mismo sentido que el levantamiento de pesas. No busca desarrollar grandes músculos, sino que trabaja la musculatura profunda y fortalece el cuerpo desde la musculatura interna hacia la externa. 

Es un trabajo de fuerza que utiliza el propio peso corporal, junto con las resistencias de las máquinas como el reformer, wunda, barrel o cadillac. Además, también se realiza en el suelo, lo que asegura un entrenamiento integral.

Ejemplo de ejercicio: El "Roll Up"

Un ejercicio clásico de pilates que trabaja tanto la fuerza como la flexibilidad es el Roll Up. Para hacerlo, sigue estos pasos:

  1. Posición inicial: Estírate en el suelo con las piernas extendidas y los brazos estirados hacia el techo.
  2. Movimiento: Exhala mientras vas despegando la espalda del suelo, vértebra por vértebra, hasta llegar a una posición sentada. Mantén el abdomen contraído para proteger la columna.
  3. Flexión hacia adelante: Desde la posición sentada, estira los brazos hacia los pies, con una flexión de la columna.
  4. Regreso: Exhala mientras, lentamente, vas bajando vértebra por vértebra hasta volver a la posición inicial.
pilates roll up

El ejercicio Roll up fortalece los abdominales.

RBA

Este ejercicio, que se puede realizar con la asistencia de las máquinas, sirve para fortalecer el core, mejora la flexibilidad de la columna y estira los músculos de la espalda. Es un buen ejemplo de las posibilidades que tiene la práctica de pilates para mejorar la salud y el bienestar general.