¿Duermes con la puerta de tu habitación abierta o cerrada? Esta es la mejor opción

Si te sientes cansada durante el día averigua si podría ser por el modo en el que duermes. Hacerlo con la puerta de la habitación abierta o cerrada tiene más importancia de la que imaginas.

Soledad López
Soledad López

Periodista especializada en salud y nutrición

Actualizado a

puerta dormitorio

En una habitación cerrada se acumula el dióxido de carbono que exhalamos.

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Si crees que tu sueño no es suficientemente reparador, pese a que pasas 7 u 8 horas durmiendo, puede que el problema es que no tienes las condiciones adecuadas.

Tan importante como dormir las horas justas es hacerlo de la mejor manera posible. Si lo haces con la puerta del dormitorio abierta o cerrada puede marcar la diferencia. La ventilación afecta a tu sueño de un modo muy significativo. Te lo explicamos.

Beneficios de dormir con la puerta de la habitación abierta

Diversos estudios han demostrado los beneficios para la salud de dormir con la puerta de la habitación abierta.

  • El sueño es más profundo. Las siestas al aire libre sientan de maravilla y en ello influye el hecho de que estás respirando aire bien oxigenado.

En una habitación cerrada ocurre justo lo contrario: en ella se acumula poco a poco el dióxido de carbono que exhalamos de forma natural al respirar. El aire se vicia a medida que pasan las horas.

Cuando la habitación está cerrada durante toda la noche, según un estudio realizado por biólogos españoles, la concentración de CO2 puede llegar incluso a 1.500 partes por millón, lo que se considera un valor extremo.

Científicos de la Universidad Técnica de Eindhoven (Países Bajos) han demostrado que abrir un poco la puerta –o la ventana si el clima lo permite– reduce la concentración de CO2 en la habitación y que eso repercute en un mejor descanso.

Cuando los niveles de dióxido de carbono son más bajos, el sueño es más profundo, se descansa más y se dan menos episodios de vigilia, según han podido comprobar estos investigadores.

  • Mejora tu concentración. Respirar un aire bien oxigenado es bueno para todo tu organismo, pero parece que tu cerebro agradece especialmente que duermas en una habitación correctamente ventilada.

Investigadores de la Universidad Técnica de Dinamarca, comprobaron que la capacidad de concentración al día siguiente de dormir en una habitación con altos niveles de CO2 empeoraban. Al realizar una prueba de lógica al día siguiente, los resultados eran mucho mejores si la habitación se había ventilado por la noche.

  • Tienes menos dolores de cabeza y te sientes menos cansado.

Otras investigaciones han encontrado que las altas concentraciones de CO2 en la habitación aumentan el riesgo de sufrir fatiga y dolor de cabeza.

Beneficios de ventilar la habitación por la mañana

Además de “dejar correr el aire” por la noche, conviene abrir la ventana cada mañana para airear la habitación y evitar la acumulación de tóxicos en ella. Si lo conviertes en un hábito, toda tu salud lo agradecerá.

  • Sufres menos alergias. Los ácaros se alimentan de las células muertas de la piel y por ello el dormitorio es uno de sus lugares favoritos para vivir. A las personas con alergia les conviene ventilar la habitación especialmente antes de hacer la cama: el sol directo “desinfecta” y la ventilación facilita la salida de muchos de ellos.
  • Reduces la probabilidad de padecer infecciones en invierno. Sobre todo durante los meses fríos, tiempo de gripes y resfriados, pueden acumularse gérmenes en el dormitorio (piensa que la calidez de la calefacción facilita su supervivencia). Ventilar a diario es un gesto sencillo para evitar que se concentren ahí.
  • Se reduce riesgo de sufrir cáncer. ¿Sabías que una habitación que huele a “cerrado” puede contener un alto nivel de radón? Se trata de un gas que, si se concentra en exceso en casa, puede favorecer el desarrollo de cáncer. Se desprende de forma natural de los materiales de construcción, pero abrir las ventanas media hora al día evita su acumulación.

¿Cómo ventilar una habitación incluso si no hay ventana?

No sirve con abrir las ventanas 5 minutos: para renovar el aire de una habitación de tamaño estándar se requiere un mínimo de 10 a 15 minutos. Y piensa que cuantas más personas duermen en un dormitorio, más dióxido de carbono se acumula y más tiempo se requiere para renovar el aire.

Abrir ventanas en la casa para que se creen corrientes de aire aumenta la eficacia de la ventilación.

Si una habitación no tiene ventana abre la puerta, coloca un ventilador delante y enciéndelo para que el aire se mueva y se renueve. Hazlo con las ventanas de alguna habitación cercana abiertas.

¿Cuál es el mejor momento del día para ventilar? A primera hora de la mañana el aire está más limpio. Sin embargo, si hace mucho frío quizá conviene ventilar un rato más al mediodía (cuando incide más el sol). En verano es buena idea abrir la ventana también por la noche porque, de paso, se refresca la estancia.