A las 31 semanas, es probable que vuelvas a notar algunos de los primeros síntomas del embarazo como el cansancio extremo, los cambios de humor y la necesidad de ir al baño con más frecuencia. Puede ser algo frustrante, pero recuerda que solo quedan nueve semanas para salir de cuentas.
Descansa lo máximo que puedas y busca maneras de relajarte y de cuidar tu salud física y mental.
La madre en la semana 31 de embarazo
La altura uterina (la distancia entre el hueso púbico y la parte superior del útero) suele ser de unos 30 centímetros en esta etapa, por lo que es posible que ya no te puedas ver los pies cuando estás de pie con la espalda recta.
A partir de esta semana, seguramente notarás los mismos síntomas que ya has estado experimentando desde que entraste en el tercer trimestre de embarazo. Estos son algunos de los más típicos:
- Los ligamentos que hay alrededor de tu pelvis se van ablandando y estirando, preparándose para el parto, por lo que puedes notar molestias.
- También puedes notar que te falta el aire debido a la presión que ejercen el bebé y el útero en tus pulmones. Andar y hablar al mismo tiempo puede resultarte una tarea difícil.
- Asimismo, la mayor presión del bebé y el útero hace que tengas ganas de orinar con mayor frecuencia.
- A medida que crece tu barriga, tu centro de gravedad se desplaza, lo que puede afectar a tu forma de caminar. Por seguridad y comodidad, es aconsejable no usar tacones altos en esta etapa del embarazo.
- Los problemas para dormir se vuelven habituales.
- También es frecuente que aparezcan estrías (especialmente si has ganado peso rápidamente). No te preocupes, después del parto irán difuminándose.
- Es completamente normal tener pequeñas fugas en los pechos. Tu cuerpo se está preparando para alimentar al bebé y ese líquido amarillo, llamado calostro, es su primer alimento.
El bebé en la semana 31 de embarazo
Tu bebé mide unos 27,5 centímetros de la cabeza a las nalgas y pesa unos 1,5 kilos. Su tamaño es similar al de un coco.
Estos son los principales cambios del feto a las 31 semanas:
- Sus cinco sentidos están completamente desarrollados.
- Sus ojos están abiertos y sus pupilas pueden reaccionar a la luz.
- Su cerebro también se desarrolla rápidamente.
- Los ruidos fuertes pueden hacer que se sobresalte.
- Va acumulando grasa, lo que hace que su piel se vuelva más lisa.
Pruebas en la semana 31 de embarazo
Las mujeres que tienen complicaciones en el embarazo (por ejemplo, diabetes gestacional) o que esperan más de un bebé puede que tengan una ecografía a las 31 semanas de embarazo para controlar que todo va bien.
También es posible que en estos casos el médico programe para esta semana un perfil biofísico para controlar el bienestar fetal (encontrarás toda la información sobre esta prueba en la semana 30 de embarazo).
Por otro lado, ¿has pensado qué hacer con el cordón umbilical? La sangre del cordón umbilical contiene células madre especiales que pueden ayudar a tratar o curar algunas enfermedades (como la leucemia). Sin embargo, es importante saber que esas células madre no las va a recibir tu bebé si se corta el cordón de manera temprana para una donación. También hay que tener en cuenta que si no se realiza un corte tardío de cordón hay riesgo de anemia para tu bebé.
Actualmente, puedes decidir si tras el parto quieres guardar la sangre del cordón umbilical en una compañía privada o donarla a un banco de sangre público.
No obstante, la legislación española establece que cualquier sangre almacenada en cualquier banco público o privado en España puede ser utilizada para cualquier paciente que la necesite.
Semana 31 de embarazo, ¿cuántos meses son?
En la semana 31 del embarazo estás en el séptimo mes de gestación y en el tercer trimestre del embarazo, un periodo en el que el rápido crecimiento del bebé puede causarte diversos síntomas físicos molestos.