Los síntomas del embarazo aún pueden ser fuertes debido a los altos niveles de hormonas en tu organismo. Sin embargo, a medida que te acercas al final del primer trimestre, muchas cosas empezarán a cambiar.
La madre en la semana 11 de embarazo
En esta semana, síntomas como las náuseas, el dolor en los pechos y el cansancio extremo pueden ser intensos, pero lo habitual es que comiencen a disminuir.
Es posible que notes calambres en las piernas o en los pies. Para evitarlo, asegúrate de comer alimentos ricos en calcio como la leche, el queso o el yogur.
En tu cuerpo hay una mayor circulación de sangre, lo que hace que las venas sean más visibles y también puede hacer que aparezcan arañas vasculares, pequeñas venas rojas en áreas drenadas por la vena cava superior (cuello, cara, brazos).
- Son más comunes en las mujeres con la piel clara y suelen desaparecer después del parto.
Los problemas estomacales también son parte del curso del embarazo. Si notas ruidos o burbujeos incómodos, vigila tu dieta y trata de evitar aquellos alimentos que provocan gases, como las legumbres (judías, garbanzos, lentejas, habas, guisantes), las verduras flatulentas (lechuga, repollo, coliflor, coles de Bruselas, alcachofa, cebolla cruda…) o ciertas frutas (ciruelas, albaricoques, plátanos o uvas pasas) y los cereales integrales (pan, pastas, arroz…).
Mantenerte activa puede ayudarte a mejorar tanto tu estado de ánimo, como tu estado físico y tu sueño, así como a aumentar tu energía y aliviar el dolor de espalda.
- La actividad física y una alimentación saludable durante el embarazo también pueden reducir el riesgo de diabetes gestacional, preeclampsia y aumento excesivo de peso.
El suelo pélvico es un grupo de músculos y ligamentos que sostienen la vejiga, el útero y el intestino. El embarazo es probablemente la etapa en la que el suelo pélvico sufre más, pues al incremento de peso concentrado en el abdomen, se suma la hiperlaxitud de los tejidos por los cambios hormonales y su distensión por el paso del bebé en el momento del parto.
- La prevención mediante ejercicios del suelo pélvico es la mejor forma de prevenir problemas como la incontinencia urinaria y también te puede ayudar con el parto y la recuperación posterior.
El bebé en la semana 11 de embarazo
Tu bebé mide unos 4,5 centímetros de la cabeza a las nalgas, pesa alrededor de 10 gramos y su tamaño es similar al de una fresa.
En esta etapa la cabeza todavía es tan grande como el cuerpo, pero estas proporciones pronto empezarán a cambiar.
Los nervios y los músculos empiezan a trabajar juntos, lo que significa que tu bebé comenzará a realizar pequeños movimientos bruscos, aunque aún es demasiado pronto para que los notes.
Además:
- El corazón está completamente formado y bombeando.
- En los dedos, que ya no tienen membranas, están creciendo las uñas.
- El cerebro y el sistema nervioso casi han terminado su desarrollo.
- La piel es todavía transparente, pero se irá volviendo más opaca.
Pruebas en la semana 11 de embarazo
El análisis de vellosidades coriónicas o biopsia corial es una prueba que se puede realizar entre las semanas 10 y la semana 13 y sirve para detectar anomalías cromosómicas. En ella se analizan las vellosidades coriónicas, unas pequeñas protuberancias que se encuentran en la placenta y tienen los mismos cromosomas que el feto.
- Para realizarla se introduce una aguja a través del abdomen o de la vagina y, utilizando las imágenes de una ecografía como guía, se recogen células de la placenta.
- Estas células de analizarán para detectar anomalías genéticas.
Se trata de una prueba diagnóstica. Esto significa que, a diferencia de las pruebas de cribado que comentamos en la semana 10 (que indican un riesgo), sus resultados predicen con certeza si el feto tiene un trastorno cromosómico.
La biopsia corial está indicada en caso de que haya un mayor riesgo de que el bebé tenga un trastorno cromosómico debido a la edad de la madre, a antecedentes familiares o a que en embarazos anteriores se haya detectado alguna anomalía.
Semana 11 de embarazo, ¿cuántos meses son?
En la semana 12 del embarazo estás en el tercer mes de gestación y te acercas al final del primer trimestre de embarazo, que normalmente es el que más molestias (náuseas, cansancio...) provoca a la madre.