El ginseng es una planta que ha sido utilizada en la medicina tradicional durante miles de años, especialmente en países como China, Corea y Japón. En la actualidad, es uno de los suplementos más consumidos del mundo. Se le atribuyen múltiples beneficios: aumenta la energía y la resistencia; ayuda a combatir la fatiga y el estrés; mejora la concentración y el rendimiento mental; fortalece el sistema inmunológico; tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias; mejora la salud cardiovascular... La evidencia científica sobre los efectos del ginseng es variada y a veces limitada. Algunos estudios respaldan sus beneficios, mientras que otros no encuentran resultados significativos. Se necesitan más investigaciones para comprender completamente sus efectos y cómo puede utilizarse como parte de un estilo de vida saludable. Investigaciones como la que ha publicado la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) en la revista Nutrients que, tras revisar más de 700 estudios, confirma que los suplementos de ginseng reducen la fatiga y favorecen la recuperación muscular después de hacer deporte.
"Hemos comprobado que el ginseng puede tener un rol importante como complemento nutricional para la recuperación después del ejercicio", apunta Borja Muñoz, preparador físico y uno de los autores del trabajo. Además el "consumo regular de ginseng no tiene, en principio, ningún perjuicio o beneficio nulo en personas sanas, salvo en caso de contraindicación médica", destaca Muñoz.
La idea de estudiar la eficacia de los suplementos de ginseng surgió porque Muñoz había trabajado en un club de fútbol en China y observó que los futbolistas tomaban suplementos de ginseng para recuperarse.
Qué ocurre cuando haces ejercicio
Cuando haces ejercicio, especialmente si es intenso o de resistencia, los músculos experimentan una serie de cambios y daños que son completamente normales y que forman parte del proceso de fortalecimiento.
Durante el ejercicio se producen microlesiones o pequeñas roturas en las fibras musculares debido a la tensión que se somete al músculo. Como respuesta a esas microlesiones, el cuerpo desencadena un proceso inflamatorio para reparar el tejido muscular dañado. La recuperación es crucial porque permite que los músculos reparen el daño causado durante el ejercicio, se adapten al estrés y crezcan más fuertes. Sin un tiempo adecuado de recuperación, los músculos pueden fatigarse, sobreentrenarse o incluso lesionarse gravemente.
Por lo tanto, es importante incluir períodos de descanso y recuperación en cualquier programa de ejercicio para optimizar los resultados y prevenir lesiones. Esto incluye la adecuada nutrición, hidratación, descanso y sueño. Y el ginseng puede jugar un papel clave en este proceso de recuperación.
ginseng para la recuperación muscular
Según el estudio de la UOC, el consumo regular de ginseng reduce el daño y la fatiga que sufren los músculos durante el ejercicio y ayuda a su recuperación. Unas conclusiones a las que los investigadores han llegado tras realizar una revisión de más de setecientos estudios sobre el tema.
¿Cómo lo logra? El ginseng contiene compuestos activos que estimulan el sistema nervioso, protegen las células del estrés oxidativo y tienen propiedades antiinflamatorias. Esto significa que puede facilitar la recuperación del cuerpo después del ejercicio intenso.
Al consumir ginseng de manera continuada, también se ha observado que disminuye la respuesta de ciertos marcadores biológicos que indican daño muscular, como la creatina-cinasa y la interleucina 6. Además, ayuda a reducir la acumulación de lactato en la sangre, un subproducto del ejercicio que puede causar fatiga muscular.
Al reducir la fatiga, el ginseng también ayuda a reducir el riesgo de lesiones, especialmente las que afectan a músculos y ligamentos, y aumentar el rendimiento deportivo.